Propone Maribel Galván la Ley para la Preservación del Arbolado Urbano del Estado de Zacatecas
La Diputada Maribel Galván Jiménez, presentó la Iniciativa para una nueva ley estatal, la Ley para la Preservación del Arbolado Urbano del Estado de Zacatecas.
Desde la Tribuna, la legisladora del Movimiento de Regeneración Nacional (morena) dijo que en Zacatecas, la Constitución Local establece en su artículo 30 la obligación del Estado de proteger el medio ambiente y del derecho de las personas a un medio ambiente adecuado.
“Además, contamos con una Ley de Cambio Climático para el Estado de Zacatecas y Municipios, así como una Ley de Desarrollo Forestal Sustentable del Estado de Zacatecas y también la Ley del Equilibrio y la Protección al Ambiente”.
“Sin embargo, una parte que queda desabrigada es la protección al arbolado urbano, el cual impacta positivamente en diferentes indicadores”, indicó.
La Ley para la Preservación del Arbolado Urbano del Estado de Zacatecas, está constituida por 67 artículos en 15 capítulos y tiene entre otros propósitos impactar positivamente en la Agenda 2030.
Así, los beneficios que se pretenden alcanzar son el de garantizar una vida saludable y promover el bienestar para todos y todas en todas las edades.
Conseguir que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles. Pero sobre todo, tomar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
“Por eso, es prioritario que sociedad y gobierno hagamos sinergia en nuestras acciones para que proyectemos un estado con desarrollo sostenible, donde se apueste por la protección de este importante activo de los árboles urbanos que tenemos en los centros de población”.
Está ley está además armonizada con las acciones nacionales que se han emprendido en torno al cambio climático, puesto que el Estado mexicano ha tomado acciones legislativas, desde reformas a la Constitución hasta la firma de 72 tratados internacionales vinculados a la materia del medio ambiente.
Por ejemplo, el Acuerdo de París, resultado de la Conferencia de París sobre el Clima (COP21), así como los beneficios señalados por la ONU Hábitat.
Concluyó indicando que una ciudad con una infraestructura verde bien planificada y bien administrada se vuelve más sostenible, mejora la calidad de vida, se adapta mejor al cambio climático, reduce el riesgo de desastres, conserva los ecosistemas y aumenta su valor comunitario.