De Moyahua a España: Dos Tastuanes Zacatecanos Llevan su Fe al Corazón de Compostela

• Hermanos Jiménez cumplen su anhelo peregrino y extienden la devoción moyahuense hasta la tumba del Apóstol, en Santiago de Compostela, España

Moyahua, Zacatecas.- En un acto que fusiona la fe ancestral de Moyahua de Estrada, Zacatecas, con la tradición milenaria del Camino de Santiago, dos devotos tastuanes han llevado el fervor de su tierra natal hasta el corazón mismo de Santiago de Compostela, España. Álvaro y Javier Jiménez Sandoval, hermanos de 56 y 52 años respectivamente, han cumplido un sueño largamente acariciado: peregrinar hasta la tumba del Apóstol Santiago vistiendo la indumentaria tradicional de los tastuanes de Moyahua.

Esta hazaña no solo representa un logro personal para los hermanos Jiménez, sino que simboliza la profunda devoción que caracteriza a Moyahua de Estrada, un municipio conocido por vivir con intenso fervor la fiesta en honor al “Santo de a caballo”, como cariñosamente se refieren a Santiago Apóstol.
El Camino de Santiago, reconocido como un acto de fe que ha perdurado por siglos, se convirtió en el escenario perfecto para que estos zacatecanos manifestaran su devoción de una manera única. Tras más de 30 años participando en las festividades locales como tastuanes, Álvaro y Javier decidieron llevar su fe un paso más allá, recorriendo los senderos que conducen a la catedral que alberga los restos del Apóstol, tal y como nos lo relató Don Javier hace unos días en Moyahua.

La presencia de estos tastuanes en Santiago de Compostela no ha pasado desapercibida. Ataviados con su indumentaria tradicional, han captado la atención de peregrinos y locales por igual, convirtiéndose en embajadores improvisados de la rica cultura y fe de Moyahua. Su objetivo ahora es obtener permiso para ingresar al recinto sagrado, cumpliendo así una promesa hecha al patrono de su parroquia natal, entrar como “tastuanes”.

El impacto de esta peregrinación trasciende lo personal, como lo demuestra el emotivo mensaje compartido por Nicolás Jiménez, hijo de uno de los peregrinos: “Hoy escribiré para el güerito del caballo en agradecimiento de toda la familia. Gracias, “Chago”, por permitirles a ellos y a todos vivir y ver esa experiencia dedicada a ti”. Estas palabras reflejan el profundo significado que este viaje tiene no solo para los hermanos Jiménez Sandoval, sino para toda una comunidad unida por la fe.

La noticia de esta singular peregrinación ha generado una ola de reacciones positivas en redes sociales, donde seguidores y devotos celebran cómo la fe puede mover montañas y cruzar océanos. Este acontecimiento no solo refuerza los lazos espirituales entre Moyahua y Santiago de Compostela, sino que también pone de manifiesto la universalidad de la devoción y cómo las tradiciones locales pueden encontrar resonancia en escenarios globales.

La presencia de estos tastuanes en España es un testimonio vivo de cómo la fe puede inspirar acciones extraordinarias, uniendo culturas y tradiciones a través de kilómetros y siglos de historia. Mientras Álvaro y Javier Jiménez cumplen su promesa en tierras lejanas, en Moyahua de Estrada y más allá, sus acciones reavivan la llama de la devoción y recuerdan el poder transformador de la fe.

Este peregrinaje no solo honra a Santiago Apóstol sino que también eleva el espíritu de una comunidad entera, demostrando que la distancia geográfica no es obstáculo para la expresión de una fe profundamente arraigada. Así, dos tastuanes de Zacatecas se convierten en puente entre dos mundos, llevando consigo las oraciones y esperanzas de todo un pueblo hasta los pies del Apóstol en Compostela.