ColumnasDe la Cámara a la Perla del Cañón

De la Cámara a la Perla del Cañón: Adopción

Qué tal amigas y amigos de “jalpita la bella”, hace unos días informé a través de este y otros espacios sobre un proyecto de iniciativa que pretendo presentar en la Cámara de Diputados en las próximas semanas.

Se trata de una iniciativa que busca agilizar los procesos de adopción en México, pues actualmente son muy lentos, quizá en el intento de las instituciones de hacer las cosas bien; sin embargo, la larga espera para los menores atenta contra sus derechos a una familia y a un sano desarrollo integral.

En su momento, en cuanto presente esta iniciativa, les daré más detalles acerca de lo que va y lo que busca atender directamente en cuanto al proceso, mientras tanto les platico un poco acerca de cómo está el tema de la adopción.

La adopción es cuando una o más personas asumen la responsabilidad sobre uno o más menores de edad o incapacitados, quienes obtienen los mismos derechos que un hijo consanguíneo.

Según el Código Familiar del Estado de Zacatecas, para poder adoptar es necesario tener cumplidos por lo menos los 25 años de edad, tener el pleno ejercicio de los derechos, tener por lo menos una diferencia de edad de 17 años más que el adoptado, y se debe de asegurar que va la adopción realmente vaya beneficiar al menor.

En la encuesta intercensal 2015 del INEGI, se contabilizaron en México, 25 mil 667 menores de edad habitaban en alguna casa hogar.

Y aunque la Ley General de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, describe el derecho que tienen a una familia y a vivir en condiciones de bienestar y a un sano desarrollo integral y que los menores que se encuentren en desamparo familiar recibirán medidas especiales de protección por parte del sistema DIF y las Procuradurías de Protección.

Lo cierto es que en Zacatecas solo el 10% de los menores que se encuentran en una casa hogar han podido ser adoptados por una familia.

En octubre de 2020 a mí me tocó conocer personalmente un caso, el de “Ángel Gabriel”, nombre con el que la gente de Tlaltenango identificó a un bebé recién nacido que, tristemente fue abandonado en una caja de pizza en las calles del municipio cuando yo era presidente.

Por lo impactante de la noticia, esta le dio la vuelta al mundo, fue a dar incluso a países europeos, y eso ocasionó que muchas personas, de todas partes, se interesaran en la adopción de “Ángel Gabriel”, me escribían o me llamaban para recibir más información.

Al final, no estaba en mis manos decidir, el pequeño quedó bajo resguardo del DIF estatal, quien a su vez lo dejó bajo la guarda de la casa hogar “Placido Domingo” y a los interesados en adoptar, los canalizamos a las autoridades para que manifestaran su interés y siguieran el proceso adecuado de acuerdo a la ley.

Así es queridos amigos, que por eso en los próximos días, después de un amplio análisis presentaré esta iniciativa. Les estaré informando. Hasta la próxima semana.