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OPORTUNIDAD PARA RECTIFICAR  

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OPORTUNIDAD PARA RECTIFICAR

La iniciativa de ampliación del plazo de participación de las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública, le den una oportunidad al gobierno de Zacatecas para construir una política de seguridad local, no por los recursos federales que recibirá el estado para el mejoramiento de su seguridad pública sino porque con el auxilio del ejército y la marina patrullando el territorio, tiene las condiciones mínimas para poner en práctica medidas que nos liberen de tanta dependencia

Hay estados como el de Coahuila que pasaron por fases de criminalidad desbordada más intensa que la nuestra cuyos gobiernos, al mismo tiempo que recibían apoyo de la federación, asumieron que era su problema y obraron en consecuencia

Si, como suele decirse, la inseguridad es el mal mayor de los zacatecanos, el incremento sustancial de los recursos destinados a la seguridad de parte de municipios y el gobierno del estado es la consecuencia obligada. La frivolidad declarativa de actores políticos atribuyendo a la falta de dinero nuestro fracaso le quita atención pública a la totalidad de variables que se combinan para que la construcción de la paz sea una realidad

El gobierno dispone o debe disponer de la información que sirva para elaborar diagnósticos panorámicos y particularizados sobre la criminalidad en el territorio, para alimentar la reflexión informada de actores políticos, académicos y ciudadanía

El problema no es técnico, es de voluntad política, si se es consecuente con la idea de que la inseguridad es lo primero que debemos enfrentar para liberar a los negocios de la extorsión, a los transportistas de los asaltos, al sector turismo de la pésima imagen del estado en lo que a eso se refiere, hay que tomar medidas fuertes contra la corrupción anidada en la esfera pública, las tibiezas no funcionan

No vemos esfuerzos por eliminar la enorme desconfianza que la gente tiene en sus autoridades, los habitantes advierten cuando se instalan grupos armados que los sumerge en una temporada más de secuestros, robos de vehículos y miedo, mucho miedo, como en estos tiempos se respira en el Rascón y Tierra Blanca, Villa Hidalgo y Pedregoso ¿No habrá quién informe a los presidentes municipales de esos movimientos? ¿Existen protocolos que den ruta a la colaboración de la gente sin exponerla en la detección oportuna de gente armada? Mucho me temo que se sigue jugando el mismo juego, el de voltearse para otro lado ya sea porque opera una especie de “renta de plaza” o por falta de compromiso de la autoridad

PARARRAYOS FAVORITO

La comparecencia del secretario de seguridad pública ante la legislatura confirma que no hemos entendido lo cómodo que resulta para un gobernante que toda la inconformidad se centre en un individuo fácilmente remplazable, como ha sucedido desde que se creó esta dependencia antes adscrita a la Secretaría General de Gobierno, de ese modo la clase política opositora y gobernante exhiben su lejanía con el problema, al que solo se refieren para golpetear al adversario y no para ofrecer alternativas

En Zacatecas los que pasan por ese puesto salen desgastados, señalados como incapaces y/o corruptos para lavar el rostro de todo un gobierno.

Es muy sugerente el contraste con el de la Ciudad de México al que, sin ser político lo candidatean, gana aplausómetros y hasta el aspirante presidencial opositor Enrique de la Madrid lo encomia y propone al frente de la Guardia Nacional.  No hay que equivocarse, Ni los buenos resultados en seguridad en Ciudad de México son mérito exclusivo de García Harsuf ni los malos resultados en Zacatecas son culpa exclusiva del general Marín y en su momento de todos sus antecesores.  Ambos son parte de un todo al que reflejan

GASTAR EN LO QUE SE NECESITA

La ampliación del plazo de las fuerzas armadas que ayer se destrabó es una magnífica oportunidad para que Zacatecas construya política local de seguridad

Urge destinar más dinero a los cuerpos policíacos. Más patrullas y menos vehículos para funcionarios, más gasolina para patrullas y menos para diputados y regidores, mejores salarios para los elementos de seguridad y reducción de los ingresos de la élite burocrática

Reordenar el gasto público es un proceso que generará resistencias que un gobernante enfrenta legitimando cada paso, cada medida. El desorden acumulado durante tantos años de imprevisión puede revertirse si se transparenta cada exceso que se busca moderar en arar de la disponibilidad de recursos locales suficientes para la seguridad de los habitantes, la revisión del costo de cada cabildo nos permitiría la reducción de sus integrantes y en el caso de varios municipios, la reducción de los ingresos de un cuerpo colegiado al que se le dejó crecer por irresponsabilidad

¿Hay idea? ¿Hay voluntad política? Pronto lo sabremos

Nos encontramos el lunes en Recreo

@luismedinalizalde-luismedinalizalde@gmail.com